Apreciando la soledad.

He aprendido a apreciar la soledad,
Quizás no porque haya querido 
Sino porque he sido obligado.


Su abrazo ha sido el único que ha llegado a calmarme, 
Y su silencio todo lo que necesitaba escuchar.


He aprendido a apreciar la soledad,
Y quizás está vez si que he querido.
Porque lo de mejor solo que mal acompañado 
Nunca habia tenido tanto sentido.


Me he enamorado de la soledad
Porque me ha enseñado a valerme por mi mismo,
A gritar lo que nadie quería escuchar, 

Y a nadar en su inmenso mar sin ahogarme 
a traición.


He tomado la soledad como un descanso, 
Y no como un castigo.

He tomado la soledad, 
SOLO.
Y sigo vivo,


Nadie  muere por reconstruirse,
Y mucho menos 
por tomarse un respiro .

Comentarios

Entradas populares de este blog

Qué me vas a contar tú a mi de los trileros

La cabeza bien alta, gilipollas

Soberbia